domingo, 4 de mayo de 2014

Retorno al punto cero

El 29 de abril era la fecha tope que planteó el Secretario del Estado norteamericano, John Kerry, para alcanzar acuerdos entre Israel y Palestina. Nada de ello ocurrió, siendo un nuevo fracaso en este proceso de paz que a esta altura no vislumbra solución. La reivindicación sobre la misma tierra, las posturas divergentes y una historia compleja son algunas de las cuestiones por las cuales esta vez Benjamin Netanyahu y Mahmud Abbas no lograron un acuerdo. 
---
A pesar que los negociadores israelíes y palestinos afirman que hace cuatro meses que no hay conversaciones directas entre las partes, la semana pasada la clave fue el anuncio en rueda de prensa de la reconciliación entre la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) y Hamas. La OLP se compone de varias formaciones políticas que lidera Abbas (también conocido como Abu Mazen). Hamas, que niega el reconocimiento de Israel de forma constante, gobierna en la Franja de Gaza y es considerado por Tel Aviv, Estados Unidos y Europa como un grupo terrorista. El primer ministro de esta región y líder de la agrupación es Ismail Haniyev, quien junto a Abbas anunció la convocatoria para elecciones en enero del 2015 y en el cual se eligiría la presidencia y el consejo legislativo de la Autoridad Palestina.

Esta aparente reconciliación pondría fin a la división existente desde 2007 entre la Franja de Gaza y Cisjordania. Se expresa como supuesta debido a que ya existieron acuerdos en 2011, tras reuniones en El Cairo y Catar, pero que nunca se terminaron de cumplir. El objetivo de ambos es formar un gobierno de unidad en cinco semanas, integrado por tecnócratas. El mismo sería liderado por Abbas o Din Al Shaer de Hamas, quien formó parte de aquel gobierno de unidad que se quebró cuando los islamistas tomaron el control de Gaza enfrentándose a los leales de Al Fatah. Hoy en día Hamas se muestra más debilitado, principalmente luego de la salida de los liderados por Mohamed Morsi en Egipto.

El fracaso de la mediación norteamericana

Ante el posible acuerdo palestino todas las partes reaccionaron. Kerry, que ya había amenazado con dejar su rol de mediador tras el estancamiento de las relaciones, expresó decepción por la decisión de Abbas. Mientras que Netanyahu, primer ministro israelí, anunció inmediatamente la cancelación de las negociaciones de paz, exigiéndole a Palestina que elija entre pactar la paz con Israel o con Hamas, no las dos juntas. El argumento es entendible en cierto punto pero también se argumento, durante estos meses, que Abbas no representaba a la totalidad del pueblo palestino. Entonces tampoco queda claro cuál es el camino. De esta manera la reunión prevista para la semana pasada entre los negociadores Tzipi Livni y Saeb Erekim fue cancelada.

El mandatario israelí tiene claro que con el mantenimiento del statu quo domina la agenda por la fuerza. Con este pacto con los terroristas, Abbas le da una buena excusa al premier israelí para echarle la culpa por el fracaso de las negociaciones. También es cierta la necesidad de un pueblo palestino unido a la hora de negociar con Israel, que exprese un compromiso completo con el establecimiento de la paz. Abbas acusa a Netanyahu de querer dialogar solo para evitar mayor presión internacional pero continuando la construcción de asentamientos. Mientras que el líder israelí culpa a su homólogo de acudir unilateralmente a las Naciones Unidas e incumplir los acuerdos.


A medida que iban pasando los meses, los objetivos de Kerry en torno al proceso de paz se iban reduciendo. Se buscó un acuerdo marco para evitar la ruptura de conversaciones pero luego con el devenir de los hechos y las múltiples visitas a Tierra Santa, desde Estados Unidos se apuntó a continuar en la mesa de negociaciones como objetivo principal. Barack Obama se refirió al suceso como una pausa que sirva para evaluar la situación, una forma elegante de aceptar un nuevo fracaso. Resta esperar si avanzará la reconciliación política palestina, con la consolidación de Abbas como líder único, lo cual implicaría barajar y dar de nuevo. Aunque el resultado suma cero de la partida seguramente se volverá a repetir por varios años más. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario